Reflexión sobre el miedo
LA BUSQUEDA DE SEGURIDAD
La mente es un mono inquieto, saltando de rama en rama en busca de frutos, por toda una selva interminable de sucesos condicionados.
Buda
El miedo se define como una perturbación angustiosa del ánimo por un riesgo, daño real o imaginario. En la sociedad actual estamos inmersos en constantes miedos, recelos y aprensiones de que suceda algo contrario a lo que deseamos. El camino más fácil para no caer en el miedo se sustenta bajo la búsqueda de seguridad.
Colombia es un país donde abunda la inseguridad por múltiples motivos económicos socioculturales, y los medios de comunicación se fundamentan en un juego donde se infunde el miedo y la solución se avista a lo lejos, ya sea por políticas de seguridad, denuncias, políticos que nos prometen o en el caso extremo se toman la justicia por su propia cuenta. En realidad todo ocurre basado en el dominio social que existe del miedo, nos falta algo, entonces necesitamos asegurar lo que tenemos, los celos, las relaciones enfermizas o la no realización exitosa de una persona están ligadas a varios temores.
A los niños y niñas desde temprana edad se les corrige infundiendo en ellos miedo, ya sea con base de mentiras o imaginarios del adulto o con amenazas de castigos y golpes. Se somete a un sin fin de temores desde muy temprana edad a estos pequeños seres, y a ello le incluimos en algunos casos religiones que restregan el temor. Se amenaza a los chicos para que estudien, para que se eduquen consiguiendo en ellos un desinterés obligado por la educación. Si no estudias no serás nadie en la vida, si no estudias no tendrás un trabajo digno, si no estudias no tendrás dinero y un estatus social que mantener. Inconscientemente se desarrolla en el joven un temor a lo que realmente desea y termina estudiando cualquier cosa y trabajando en lo primero que se le aparece, convirtiendo su vida en una monótona linea continua, porque teme a no conseguir dinero y como ya se tiene una estabilidad.
Por eso callamos, por eso no decimos nada porque tenemos miedo a perder lo que conocemos, a lo que tenemos a la terminación de lo monótono, lo desconocido produce pavor. El cambio no nos interesa, por el contrario pueden pasar años y años y seguimos pensando y creyendo en las mismas cosas llenos de prejuicios y cada vez con la mente más cerrada.
Es momento de que cada persona sea consiente de todo aquello que NO la hace feliz y no la realiza como persona, no nacimos para ser maquinas que dedican todo su tiempo a trabajar y los fines de semana a gastar lo que se gana. La vida no es un circulo vicioso que se relaja cada vez que tenemos vacaciones; el sistema económico vil y mezquino que actualmente nos dirige ha encaminado a que nuestra vida gire en torno al dinero, pues sin el ya no se puede acceder a nada. Este sistema amalgamado por la convergencia de medios, políticas y empresas nos muestran el miedo, pues ellos son la seguridad que tanto buscamos, una seguridad efímera, porque si algún día te falta el dinero caes preso ante no poder acceder a lo que ellos nos ofrecen.
Es tan grande el temor y el miedo que ahora se individualizo aún más el YO, cada vez los productos y las segmentaciones de mercado de la perversa mercadotecnia, nos investiga voraz para saber todo a cuanto en nuestras necesidades y deseos ellos pueden adentrarse de una manera mucho más directa. Nos dice Jcaques Attali en su libro Fraternidades (Una nueva utopia) "A pesar de las ideas recibidas, la mundialización no vendrá acompañada de unificación, Se pasará, al contrario, de la globalización de mercado a un pluralismo de mercado. Hasta las empresas multinacionales diversificarán sus productos al capricho de la cultura de sus clientes y, en algunos casos, llegarán a camuflar su universalidad detrás de confederaciones de empresas locales, creando sin cesar nuevas diversidades al mestizar culturas y expectativas. "
Cada vez más hay un YO enardecido dentro de nuestras mentes que busca desaforadamente metas y sueños egoístas, pues la falta de seguridad nos persigue incesante en el camino del pasado y el futuro. El futuro es, una proyección basada en la seguridad a lo largo de los años si algo se sale de control, perdemos la cabeza y el temor nos viene como un sin fin de dolorosos episodios, que en muchos casos solo ocurre en la pantalla de nuestra mente.
El primer miedo, es el fracaso, las personas se sienten inseguras al pensar en no conseguir lo que desean, entonces desde nuestra experiencia mental se crean diferentes tipos de formas ya sea para evitar este miedo, camuflarlo o enaltecerlo. Si olvidamos vivir el presente tal y como se nos presenta, no podremos construir un futuro que nos permita no pensar en el fracaso; cuando se edifica bien una labor, el fracaso no aparece como error, sino como una experiencia para seguir creciendo. NO MÄS MIEDO AL FRACASO.
Rechazamos cuanta opinión no nos confiere el confort que deseamos, rechazamos cuanto pensamiento, idea o filosofía derrumba nuestras creencias y amalgama de prejuicios. La mente abierta permite a las personas expandir su conciencia, pues el mundo necesita con urgencia que cambiemos nuestra forma de ver las cosas, total esta visto que lo que estamos haciendo como sociedad no nos está conduciendo sino a la destrucción de nuestro entorno.
Riesgo es una palabra que produce horror, a nadie le gusta sentirse en riesgo. Al nombrar una cosa le estamos quitando la posibilidad de ser otra, y el riesgo no es más que una forma de aventurarse al cambio, pero es un cambio positivo, nada es para mal. Nos produce entonces en la mente temor al pensar en lanzarnos a lo desconocido, pues perdemos lo conocido y el confort físico.
La mente lo es todo, en ella se encuentra cada mapa de la realidad y lo que existe en ella, es como se enfrenta la vida. Lo que sabemos sirve de base a lo que creemos, y si sabemos solamente lo que suponemos, pues estamos dejando a un lado lo que realmente significa vivir. El cambio se encuentra en cada uno de nosotros, es momento de que cada persona despierte conciencia y actúe para lograr un mundo que restablezca su curso y su evolución. Confía en ti, cree en ti.